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Evaluación de la Lacosamida en el Tratamiento de la Depresión y la Ansiedad Comórbidas en Pacientes con Epilepsia

  • TITULO :  Evaluación de la Lacosamida en el Tratamiento de la Depresión y la Ansiedad Comórbidas en Pacientes con Epilepsia
  • AUTOR : Moseley B, Cole D, Privitera M y colaboradores
  • TITULO ORIGINAL : The Effects of Lacosamide on Depression and Anxiety in Patients With Epilepsy
  • CITA : Epilepsy Research 110:115-118, Feb 2015
  • MICRO : En el presente estudio se analizó la eficacia de la lacosamida para el tratamiento de los síntomas de depresión y ansiedad en pacientes con epilepsia focal.

Introducción 

Los trastornos de ansiedad y la depresión son las comorbilidades más frecuentes en los pacientes con epilepsia, afectan su calidad de vida tanto como la falta de control de las convulsiones y aumentan de manera sustancial el riesgo de suicidio. Para su detección, los neurólogos en general utilizan el Neurological Disorders Depression Inventory for Epilepsy (NDDI-E) y la escala de 7 ítems Generalized Anxiety Disorder (GAD-7). El NDDI-E es un cuestionario de autoevaluación de 6 ítems diseñado para evaluar la depresión en personas con epilepsia, con una puntuación máxima de 24. La escala GAD-7 es un instrumento que mide los síntomas de ansiedad y tiene una puntuación máxima de 21. Para el tratamiento de la ansiedad y la depresión, los neurólogos se basan en las propiedades estabilizadoras del estado de ánimo de los fármacos anticonvulsivos, como la carbamazepina, la lamotrigina, la oxcarbazepina y el valproato, siempre teniendo en cuenta que otros fármacos, como el levetiracetam y el perampanel, podrían contribuir a la exacerbación de los síntomas como irritabilidad, ansiedad y depresión.

La lacosamida es una droga aprobada por la Food and Drug Administration (FDA) de los EE.UU. para el tratamiento de las crisis focales, como monoterapia o como coadyuvante. Aunque este agente es un tratamiento eficaz para las crisis focales, sus efectos sobre el estado de ánimo aún se desconocen.

El objetivo de este estudio fue evaluar los cambios en los síntomas de la depresión y la ansiedad con el tratamiento con lacosamida en pacientes con epilepsia.

Materiales y Métodos

Se revisaron los registros clínicos electrónicos de todos los pacientes evaluados en el Epilepsy Center de la University of Cincinnati, desde enero de 2008 hasta agosto de 2012. Los datos extraídos incluyeron el tipo de crisis, las drogas antiepilépticas administradas, las terapias psicotrópicas concomitantes, los antecedentes de trastornos del estado de ánimo y la frecuencia de las crisis. Los criterios de inclusión en el estudio abarcaron una edad mayor de 18 años, diagnóstico de crisis de inicio focal, haber iniciado el tratamiento con lacosamida tras la aprobación de la FDA y por lo menos una evaluación de seguimiento dentro de los 6 meses del inicio del tratamiento. Para ser incluidos en el análisis, los sujetos debían tener, como mínimo una evaluación basal con el NDDI-E y la GAD-7, antes del inicio de la lacosamida, y al menos una evaluación con ambas herramientas tras el comienzo del tratamiento. Fueron excluidos del estudio los individuos con deterioro cognitivo que no les permitiera completar el NDDI-E o la GAD-7 o si habían suspendido la lacosamida antes de cumplidos los 3 meses de tratamiento.

Resultados

Noventa y un pacientes fueron incluidos en este estudio. La mayoría tenía trastornos comórbidos del estado de ánimo (n = 62; 68.13%), habían recibido fármacos estabilizadores del estado ánimo (n = 48; 52.75%) o ambos. En una minoría de los pacientes se indicó tratamiento psiquiátrico concomitante (n = 40; 43.96%).

Los resultados del NDDI-E se obtuvieron antes y después del inicio del tratamiento con lacosamida en todos los pacientes (n = 91). Sin embargo, las puntuaciones basales y de seguimiento de la GAD-7 estuvieron disponibles solo para 20 sujetos. La puntuación media basal del NDDI-E fue de 12.14 ± 4.64,  similar a la media de la evaluación realizada después del tratamiento, de 11.91 ± 4.14. Las puntuaciones medias de la GAD-7 al inicio del estudio (4.10 ± 4.52) y después del tratamiento (4.75 ± 5.51) tampoco difirieron de manera significativa.

Veinticinco pacientes obtuvieron puntuaciones iniciales elevadas en el NDDI-E, de más de 15 puntos (promedio: 17.60 ± 1.63). Trece de estos pacientes (52%) recibieron tratamiento psiquiátrico concomitante (en su mayoría, un antidepresivo). En el seguimiento, luego de la administración de lacosamida, en estos pacientes se observó la disminución significativa en la puntuación del NDDI-E (14.64 ± 2.78). En todos los casos, la presencia (o ausencia) de antecedentes de trastornos del estado de ánimo no tuvo efectos sobre los cambios en el NDDI-E o la GAD-7.

No se observaron efectos significativos del tratamiento psiquiátrico concomitante, ni de las drogas antiepilépticas estabilizadoras del estado de ánimo en ninguna de las dos evaluaciones.

Discusión y Conclusión

Los autores sugieren que, de acuerdo con los resultados de este estudio, la lacosamida no causa cambios clínicamente significativos en los síntomas de depresión o ansiedad en los pacientes sin antecedentes previos de depresión o ansiedad generalizada. Sin embargo, destacan que hubo un efecto beneficioso sobre los síntomas depresivos en un subgrupo con puntuaciones elevadas iniciales en el NDDI-E, que sugirieron la presencia de trastorno depresivo mayor. También consideran que los resultados de este estudio plantean la posibilidad de que promover la inactivación lenta de los canales de sodio puede ser tan importante como su inactivación rápida en relación con la acción benéfica que ejercen sobre los síntomas depresivos. A su vez, los autores destacan que la lacosamida no empeoró significativamente el cuadro depresivo ni el trastorno de ansiedad generalizada. Este hallazgo puede ser de importancia al considerar este agente para el tratamiento de los pacientes con epilepsia y ansiedad comórbidas o depresión, ya que como no causó empeoramiento apreciable en los puntajes del NDDI-E y la GAD-7, se suman más datos para sostener que la lacosamida es segura en los pacientes con enfermedad psiquiátrica subyacente. Además, por su perfil de tolerabilidad relativamente favorable, su forma de titulación y su indicación actual como monoterapia puede preferirse a otras drogas anticonvulsivas, como el levetiracetam, de la cuales ya se ha informado que agravan los síntomas de las alteraciones del estado de ánimo.

Según los investigadores, el presente estudio tuvo algunas limitaciones. En primer lugar, fue un estudio abierto, no controlado con placebo. Segundo, en no todos los pacientes se evaluó la ansiedad hasta más de 2 años después de la aprobación de la lacosamida. Tercero, aunque se estudió la indicación conjunta de drogas antiepilépticas con propiedades estabilizadoras del estado de ánimo, no se examinó la prescripción de otros anticonvulsivantes sin estas propiedades. Por lo tanto, los autores no pueden concluir si cualquier cambio en los síntomas de depresión y ansiedad generalizada (o la ausencia de ella) fue influenciado por otros fármacos sin propiedades documentadas de estabilización del estado de ánimo. Por último, el estudio no utilizó evaluaciones psiquiátricas estructuradas, más allá de la GAD-7 y el NDDI-E, lo cual limitó la capacidad de extraer conclusiones sobre los efectos de la lacosamida en otros síntomas de los trastornos del estado de ánimo.

A pesar de estas limitaciones, los autores sostienen que los resultados del presente estudio mostraron que la lacosamida no se asoció con cambios significativos en la depresión y en la ansiedad. Además, los análisis de subgrupos con puntuaciones iniciales del NDDI-E mayores de 15 sugirieron que la lacosamida se asoció con mejorías en los síntomas depresivos. De acuerdo con los resultados obtenidos, los expertos consideran que la lacosamida es una opción aparentemente segura en pacientes con epilepsia y trastornos comórbidos del estado de ánimo. Dada la alta prevalencia de depresión y ansiedad en esta población, la lacosamida representa una alternativa para el tratamiento de las convulsiones, al mismo tiempo que evita la exacerbación de los trastornos subyacentes de estado de ánimo

Especialidad: Bibliografía - Neurología

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