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Analizan la Incidencia de Síndrome Metabólico en Mujeres con Síndrome de Ovarios Poliquísticos

  • AUTOR: Çalişkan E, Kiliç T, Bodur H, Zeteroğlu S
  • TITULO ORIGINAL: The Frequency of Metabolic Syndrome in Women with Polycystic Ovaries at Reproductive Age and Comparison of Different Diagnostic Criteria for Metabolic Syndrome
  • CITA: Journal of the Turkish German Gynecological Association 8(4):402-407, Dic 2007
  • MICRO: Con síntomas de anovulación, hiperandrogenismo y ovarios poliquísticos se verifica la presencia de síndrome de ovarios poliquísticos, que puede producir resistencia a la insulina, de igual manera que el síndrome metabólico.

Introducción

Cuando se presentan síntomas de anovulación, hiperandrogenismo y ovarios poliquísticos se confirma la sospecha diagnóstica de síndrome de ovarios poliquísticos (SOP). Este cuadro puede asociarse con resistencia a la insulina (RI), de igual manera que el síndrome metabólico (SM). Dado que no existen registros de la incidencia de SM en mujeres con SOP, en el presente estudio se intentó determinar la frecuencia de SM, utilizando 5 criterios diagnósticos para el SOP.

Materiales y métodos

Población de estudio. Se realizó un estudio de casos y controles, durante 2004 y 2006, en las Kocaeli University, Mustafa Kemal University y las Van 100 Yil University Clinics of Obstetrics and Gynecology, en el que participaron 182 mujeres con SOP y sus respectivos controles.

Definición de SOP y de SM. Para el diagnóstico del SOP se utilizaron los criterios del Rotterdam ESHRE/ASRM-Sponsored PCOS Consensus Workshop. En todos los casos se trató de pacientes de reciente diagnóstico que no habían recibido tratamiento durante los últimos 3 meses (anticonceptivos orales, antiandrógenos o tratamiento para la reducción de los niveles plasmáticos de lípidos o glucemia). Para conformar el grupo control se eligieron mujeres que, aunque tenían ovarios poliquísticos, no presentaban alteraciones en su sangrado menstrual, mostraban ecografía transvaginal normal y no tenían hiperandrogenismo en los estudios de laboratorio.

En el caso del SM, se utilizaron los criterios diagnósticos del National Cholesterol Education Program Expert Panel y de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En este caso, tampoco se incluyeron pacientes tratadas en los últimos 3 meses.

Análisis de laboratorio. Se tomaron muestras de sangre durante la fase folicular del ciclo menstrual, 2 veces al día, con una diferencia de 12 horas. Se validó el peso, la talla y la circunferencia de la cintura y de la cadera y se registró la presión arterial en el brazo derecho, luego de que las pacientes permanecieran sentadas durante 15 minutos. En el análisis de orina se midió la concentración de albúmina y, en sangre, el nivel de colesterol total y discriminado en sus fracciones asociadas a lipoproteínas de alta y baja densidad (HDLc y LDLc, respectivamente), el nivel de triglicéridos y la glucemia. En todas las pacientes se realizó la prueba de tolerancia a la sobrecarga de 75 g de glucosa por vía oral, la que se acompañó de la determinación de los niveles de insulinemia. Esta prueba se consideró positiva cuando se detectaron niveles de glucemia de 140 a 199 mg/dl luego de pasados 120 minutos de haber recibido la sobrecarga de glucosa. Por último, se calculó el índice de evaluación del modelo de homeostasis (HOMA) con su fórmula habitual: HOMA-RI = nivel de glucosa en sangre (mg/dl)/18 x nivel de insulina en sangre (IU/L)/22.5.

Resultados

El 68.7%, 92.2% y 52.2% de las mujeres con SOP presentaron anovulación, hiperandrogenismo y ovarios poliquísticos, respectivamente. La media de edad de esta población fue de 23.21 ± 4.5 años, mientras que en el grupo control fue de 24.6 ± 4.6, con una diferencia no significativa entre ambos (p = 0.537).

El índice de masa corporal (IMC), la glucemia y la insulinemia, el nivel de triglicéridos, el colesterol total y el LDLc fueron más elevados en el grupo de mujeres con SOP. En cambio, el nivel de HDLc fue más elevado en las participantes del grupo control. No se hallaron diferencias significativas entre las circunferencias de la cadera y la cintura entre ambos grupos. Los valores promedio del puntaje de Ferriman-Gallwey del grupo con SOP fueron de 16.4 ± 8.8, mientras que en el grupo control fueron de 3.8 ± 2.3.

Se encontró mayor incidencia de SM en el grupo con SOP que en el grupo control; lo mismo sucedió en el caso de la hipertensión. Al emplear como valor de referencia una circunferencia de la cintura de 80 cm (en lugar de 88 cm), se detectaron más mujeres en riesgo de presentar SOP en ambos grupos. Lo mismo sucedió al cambiar el valor de referencia del nivel sérico de las HDL de 39 a 50 mg/dl. En el caso de la glucemia, cuando el valor considerado se redujo de 110 mg/dl a 100 mg/dl, también se incrementó la cantidad de participantes de ambos grupos en riesgo de presentar SOP.

En el caso del SM, su incidencia fue en aumento en el grupo control a medida que aumentaba la edad de las mujeres. Esto no se observó en el grupo con SOP, en el que la incidencia de SM no varió según la edad. En cambio, al realizar una comparación entre ambos grupos, se detectó que el SM se presentó a edades más tempranas en el grupo con SOP.

Discusión

No existen datos epidemiológicos que relacionen el SOP con el aumento del riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, en esta población es muy elevada la probabilidad de tener diabetes, obesidad y RI. Cuando se detectan niveles plasmáticos elevados de colesterol total y de su fracción LDLc, existe riesgo de aterogénesis debido a la mayor cantidad de pequeñas partículas de lípidos que se acumulan en el interior de los vasos.

En un estudio llevado a cabo en mujeres jóvenes, McGill y col. determinaron que el IMC no tenía influencia en el aumento del riesgo de enfermedad coronaria. Sin embargo, en las mujeres con panículo adiposo importante, la posibilidad de lesiones coronarias fue elevada. En estudios de sangre realizados post mortem se detectó que los niveles de LDLc, hemoglobina glucosilada y el grosor de la capa media de las arterias renales (marcadora de hipertensión) se encontraban aumentados.

La RI se presenta tanto en el SOP como en el SM. Legro y col. demostraron que la incidencia de RI fue mayor en las mujeres con SOP cuando se las comparó con pacientes menopáusicas. En este estudio se evaluó este trastorno y se estableció un valor de HOMA-RI de 2.5 como estadísticamente significativo para la presencia a largo plazo de enfermedad coronaria, debido a la exposición a los elevados niveles circulantes de insulina.

Las mujeres con SOP presentan SM a edades más tempranas que aquellas en un grupo control; no obstante, el aumento de la edad es un factor que incrementa el riesgo de presentar SM en ambos grupos.

Según la International Diabetes Federation, los criterios son casi los mismos, sólo varían en el requerimiento de «obesidad abdominal». En los países de Europa se toma como límite una circunferencia de la cintura de 94 cm para los hombres y de 80 cm para las mujeres y en aquellos pacientes que presentan un IMC > 30 se propone no medir este parámetro. Por otro lado, la OMS define el SM como la intolerancia a la glucosa. Sin embargo, a pesar de que este síndrome presenta alteraciones en la glucemia, en el Adult Treatment Panel III del National Cholesterol Education Program no se contemplan evaluaciones de RI o hiperinsulinismo. Según la US Third National Health and Nutrition Examination Survey, el SM se presenta más frecuentemente entre los 20 y 70 años.

En el presente estudio se detectó una media de edad de 24.6 ± 4.6 para las mujeres con controles normales de salud con una prevalencia de SM del 2.7%. Debido a que los niveles de glucemia no superaron los 100 mg/dl y el porcentaje de mujeres con SM fue elevado en el grupo control, no se halló una diferencia estadísticamente significativa en la prevalencia de SOP entre el grupo de estudio y el grupo control. Esto podría explicarse por la diferente sensibilidad de las escalas utilizadas para la detección de cada uno de los parámetros que definen el síndrome, sumado a las diferencias propias, presentes en las distintas razas. Así, los autores cuestionan el diagnóstico de SM basado en un solo criterio; en este caso, la intolerancia por vía oral a la sobrecarga con 75 g de glucosa.

Cuando se utilizaron otras escalas de medición, que valoran criterios más amplios, se detectó una prevalencia de SM del 46% en una población similar a la del presente estudio. Este dato señalaría que el SOP actúa como un factor que predispone a la aparición de SM. En ensayos previos se detectó una prevalencia del 45% de SM en mujeres de 20 años con SOP, valor que aumenta a un 53% en el caso de pacientes de 29 años. Estos valores se presentan muy por encima de los de la población general: 6% para las mujeres de 20 a 29 años y 15% en aquellas de entre 30 y 39 años.

Según los autores, el SOP debe considerarse una enfermedad que se asocia con graves problemas de salud. Ante una mujer joven con SOP, se debe realizar el diagnóstico oportuno de SM para disminuir el tiempo de esta patología y prevenir las posibles complicaciones cardiovasculares asociadas. También se deben implementar medidas preventivas, como vida sana y dieta saludable, para mejorar la calidad de vida de las mujeres que presentan SOP.

Especialidad: Bibliografía - Ginecología

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