Bibliografía

Laboratorios Bagó > Bibliografías > Complemento Nutricional de Aceite de Krill y Funciones Cognitivas en Adolescentes

Complemento Nutricional de Aceite de Krill y Funciones Cognitivas en Adolescentes

  • TITULO : Complemento Nutricional de Aceite de Krill y Funciones Cognitivas en Adolescentes
  • AUTOR : van der Wurff I, von Schacky C, Groot R y colaboradores
  • TITULO ORIGINAL : A Protocol for a Randomised Controlled Trial Investigating the Effect of Increasing Omega-3 Index With Krill Oil Supplementation on Learning, Cognition, Behaviour and Visual Processing in Typically Developing Adolescents
  • CITA : BMJ Open 6(7), Jul 2016
  • MICRO : El estudio Food2Learn es una intervención controlada, aleatorizada y con doble enmascaramiento, consistente en el aporte complementario de aceite de krill, durante un año, a adolescentes de entre 13 y 15 años, para aumentar el índice de omega-3, con el objetivo de analizar su influencia sobre el desarrollo cognitivo, el desempeño académico y la conducta.

Introducción y objetivos

Los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (LCPUFA, por su sigla en inglés) de la familia omega-3 están involucrados en muchos aspectos del funcionamiento cerebral, como la fluidez de la membrana neuronal y la neurotransmisión. Existe controversia sobre si los LCPUFA mejoran el desempeño cognitivo. Hay datos que indican que el consumo de LCPUFA omega-3 tiene un efecto protector sobre el deterioro cognitivo de la vejez y de la enfermedad de Alzheimer, fortalece el desarrollo cognitivo en los niños prematuros y mejora los síntomas asociados con el autismo y con el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en los niños.

Si bien se sabe que el cerebro y la corteza prefrontal se desarrollan hasta el final de la segunda década de vida, los estudios sobre los LCPUFA omega-3 en adolescentes han sido limitados. Más aún, los autores expresan que no existen estudios controlados sobre la asociación entre el aporte complementario de LCPUFA omega-3 y las funciones cognitivas en adolescentes. Algunos estudios publicados han informado que los adolescentes de 15 años que consumían regularmente pescado (una fuente de LCPUFA) tenían mejor desempeño académico que sus pares no consumidores de pescado, y que esa ventaja se mantenía hasta los 18 años. En otro estudio de 700 adolescentes de entre 12 y 18 años, el mayor consumo de pescado se asoció con un vocabulario más desarrollado y mejores logros académicos.

Los 2 LCPUFA omega-3 más abundantes son el ácido docosahexaenoico (DHA) y el ácido eicosapentaenoico (EPA). Algunos estudios observacionales han sugerido una asociación beneficiosa entre el consumo de pescado (la principal fuente de DHA y EPA) y los síntomas de depresión y de baja autoestima de la adolescencia.

El aceite de krill contiene entre 30% y 65% de EPA y de DHA, en forma de fosfolípidos. Los fosfolípidos tienen propiedades de emulsificación que favorecen la absorción cerebral. La cantidad total de grasa en la dieta también influencia la absorción de fosfolípidos, ya que los LCPUFA se absorben 3 veces más si se administran con una dieta alta en grasas.

El presente estudio describió el diseño de la investigación Food2Learn, una intervención controlada con un placebo, aleatorizada y con doble enmascaramiento, consistente en el aporte complementario de aceite de krill durante un año a adolescentes de entre 13 y 15 años, para aumentar el índice de omega-3 y con el objetivo de analizar la influencia de esta intervención sobre el desarrollo cognitivo, el desempeño académico y la conducta. Además, se buscó evaluar los efectos de algunos factores de confusión, como la biodisponibilidad, el índice omega-3 basal y las características poblacionales.

Participantes y métodos

Los participantes del estudio se seleccionaron entre adolescentes que concurrían a la escuela secundaria. Ciento veintitrés escuelas en las provincias del sur de Holanda fueron contactadas. Diecinueve consejos escolares dieron su aprobación para participar en el estudio. Los participantes y sus familiares a cargo firmaron un consentimiento informado y se los puso en conocimiento de que podían abandonar el estudio en cualquier momento, si así lo deseaban.

Para maximizar la probabilidad de observar un efecto del aporte complementario del aceite de kril, los participantes del estudio se seleccionaron sobre la base de un índice de omega-3 bajo (< 5%). El índice se define como el EPA más el DHA eritrocitarios, incorporados a una fórmula de cálculo mediante un método analítico estandarizado. Fueron excluidos los participantes con un índice de omega-3 basal > 5% y aquellos con alergia al pescado o a los mariscos, o con antecedentes de hemofilia.

Al ingreso al estudio, los participantes fueron estratificados por sexo y fueron asignados en forma aleatoria y en igual número al grupo tratamiento o al grupo placebo. Tanto los investigadores como los participantes permanecieron enmascarados a la asignación. Los participantes fueron sometidos a una batería estandarizada de pruebas para evaluar aspectos neuropsicológicos y cognitivos. Después de las pruebas, los participantes comenzaron con el aporte complementario establecido. Las cápsulas de aceite de krill contenían triglicéridos (32%), ácidos grasos libres (6% a 7%), EPA (65 mg), DHA (35 mg) y otras sustancias en cantidades menores. Las cápsulas de placebo contenían una mezcla balanceada de ácidos grasos. En la primera parte del estudio, los participantes ingirieron 4 cápsulas por día (EPA: 260 mg; DHA: 140 mg). En una etapa posterior, la ingesta fue aumentada a 8 cápsulas por día (EPA: 520 mg; DHA: 280 mg). La observancia terapéutica fue controlada mediante contactos telefónicos periódicos y con la devolución de los envases de las cápsulas. El índice omega-3 fue determinado a los 3, 6 meses y 12 meses.

Las medidas de resultado incluyeron las pruebas neuropsicológicas y cognitivas. Estas pruebas fueron seleccionadas sobre la base de su utilidad previa con adolescentes, y evalúan la activación de la corteza prefrontal (velocidad de procesamiento de la información, atención selectiva, memoria de corto plazo, memoria de trabajo, variación cognitiva e inhibición cognitiva). El desempeño escolar se clasificó sobre la base de un puntaje de 1 a 10. Las variables de evaluación del comportamiento incluyeron el ausentismo, la motivación, el estado de ánimo, la presencia de síntomas depresivos y la autoestima. Otras medidas de resultado fueron recabadas mediante un cuestionario: consumo de pescado, fase de desarrollo puberal, uso de fármacos, ingesta de complementos nutricionales y logros académicos previos, entre otras.

Los estudios de ácidos grasos en sangre se hicieron con cromatografía gaseosa y se expresan como índice omega-3, según un procedimiento estandarizado. La presencia del gen de la apolipoproteína E se determinó en muestras de saliva. La proteína APOE juega un papael importante en la homeostasis lipídica y uno de los polimorfismos del gen asociado (épsilon 4) se relacionó con un mayor riesgo de enfermedad de Alzheimer.

Estudios derivados

A todos los participantes del estudio principal se les ofreció participar en el ensayo de seguimiento visual y en el estudio del sueño. El seguimiento visual es un método en el cuál se registran los movimientos oculares de los participantes, y pueden calcularse variables como el número de parpadeos, el número de fijaciones de la mirada y la duración de éstas. El análisis de los movimientos oculares puede brindar información sobre procesos cognitivos subyacentes, como la cantidad de procesamiento visual y la energía mental involucrada. En el estudio Food2Learn, el seguimiento visual fue utilizado para medir el efecto del aporte complementario del aceite de krill sobre los procesos cognitivos. Un subgrupo de 33 participantes fue incluido en el estudio de seguimiento visual, con evaluaciones al inicio, a los 6 meses y a los 12 meses.

Un subgrupo de 64 estudiantes participaron en el estudio del sueño, que analizó la relación entre el incremento de ácidos omega-3, la duración del sueño y la calidad de éste. Algunas investigaciones han mostrado que la administración de un complemento de DHA a los niños aumenta el tiempo de sueño y disminuye las interrupciones nocturnas del sueño. La mejoría del sueño incide positivamente en la salud general, en el desempeño cognitivo y en el rendimiento escolar.

Muestra

El cálculo inicial del tamaño muestral se hizo sobre la base de una presunción de potencia del 80%, a un tamaño promedio del efecto de 0.3 y al análisis estadístico con la prueba de ANOVA. Se consideraron también para el cálculo la aparición de mediciones múltiples y los abandonos de los participantes durante el estudio. El cálculo arrojó un total entre 183 y 285 participantes. Para el análisis del sueño se determinó un número de 42 participantes (21 en cada grupo). No se efectuó cálculo del tamaño muestral para el estudio de seguimiento ocular, por considerarse éste de carácter exploratorio.

Inicialmente se incluyeron en el estudio 288 estudiantes que brindaron el consentimiento informado. No se tomaron muestras de sangre en 4 participantes (1 participante fue retirado del estudio por una crisis de hiperventilación durante la extracción de sangre; 2 sujetos desistieron de su consentimiento antes de empezar el estudio). Quince participantes tuvieron un índice omega-3 > 5%. Finalmente, el estudio se hizo sobre 266 adolescentes. Los primeros estudiantes fueron incorporados en 2014. Los autores anticipan completar el tamaño muestral calculado durante el segundo semestre de 2016.

Conclusiones

Food2Learn es el primer estudio de intervención en el cuál se evalúa la influencia del aporte complementario, durante un año, de aceite de krill sobre la cognición, los logros académicos y el comportamiento de un grupo de adolescentes en desarrollo. El aceite de krill es una fuente importante de ácidos grasos omega-3. Las investigaciones derivadas del estudio principal contribuirán a aclarar aspectos aún no analizados adecuadamente en el campo de la investigación clínica de los LCPUFA.

Especialidad: Bibliografía - Neurología - Nutrición

ADVERTENCIA:

El material incluido en este sitio ha sido concebido exclusivamente para los profesionales de la salud con fines informativos, y destinado a orientar sobre el uso adecuado de los medicamentos y a satisfacer sus necesidades de mayor información.

Todos los textos referidos a nuestros productos de venta bajo prescripción médica se corresponden a los lineamientos aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).

Laboratorios Bagó le sugiere consultar siempre a un profesional de la salud calificado ante cualquier duda sobre una condición médica particular.

He comprendido y deseo ver la información

Consultas médicas: infoproducto@bago.com.ar